Guías de presión, características e indicaciones

La enfermedad arterial coronaria (EAC), es la enfermedad más común en el corazón y afecta a la salud de millones de personas en todo el mundo.

Es una afección en la que se deposita un cúmulo de colesterol y otros materiales (placa) en la pared interna de las arterias coronarias. Estas arterias son las responsables de suministrar oxígeno al músculo cardíaco. En pacientes con EAC, la placa produce una estenosis o estrechamiento de la arteria, restringiendo el flujo sanguíneo y reduciendo la cantidad de oxígeno que llega al corazón.

El tratamiento para la enfermedad arterial coronaria implica terapia médica mediante la administración de fármacos además de cambios en el estilo de vida del paciente. En algunos casos, los pacientes con insuficiente suministro de oxígeno en el corazón, es decir, con isquemia miocárdica, pueden verse sometidos a una intervención coronaria percutánea (ICP)  o cateterismo para una posible implantación de stents en aquellos vasos parcialmente ocluidos.

Durante el cateterismo lo que se hace es realizar una coronariografía, que consiste en inyectar contraste dentro de las arterias coronarias y visualizar bajo rayos X en distintas proyecciones si éstas presentan estrechamientos y, en ese caso, dónde se localizan.

De esta manera se estima visualmente la severidad de las lesiones para decidir el tratamiento a seguir. Sin embargo, esta metodología guiada exclusivamente por imagen, puede tener una cierta variabilidad ya que depende de la valoración del operador y de la imagen obtenida en cada proyección.

Una correcta decisión de tratamiento conlleva un mejor pronóstico para el paciente y reduce la carga y el gasto sanitario, por lo que en aquellas lesiones angiográficamente dudosas se suele utilizar una técnica adicional a la coronariografía denominada FFR (Reserva Fraccional de Flujo).

Ésta es una prueba diagnóstica que permite conocer la importancia fisiológica de una estenosis concreta de una arteria coronaria, ayudando a los médicos a identificar con más de un 90% de precisión si el estrechamiento es severo o no y, por tanto, aplicar el tratamiento adecuado.   

Para realizar una medición FFR se administra adenosina, un fármaco vasodilatador y se utiliza una guía especial denominada guía de presión. La guía tiene un sensor que permite medir la presión dentro del vaso y relacionar el flujo que hay antes y después del estrechamiento. Esto permite comparar el flujo máximo alcanzable en presencia de una estenosis con aquel que teóricamente habría en ausencia de dicha estenosis.

Tras hacer la medición, lo que se obtiene es un valor numérico entre 0.00 y 1.00. Se considera un valor normal por encima de 0.80, de manera que si obtenemos un valor inferior significa que la lesión provoca una disminución notable del flujo sanguíneo y, por tanto, el aporte de oxígeno más allá del estrechamiento es anormalmente bajo. En este caso, sería necesario tratar la lesión mediante la implantación de un stent (angioplastia).

 

¿Qué características tiene la FFR?

  • Es independiente de cambios hemodinámicos del paciente.
  • Tiene en cuenta la contribución colateral, es decir, la formación natural de pequeños “puentes” para conducir la sangre al área afectada ante la presencia de una obstrucción coronaria.
  • Está relacionada con la masa de tejido irrigado por el vaso evaluado.
  • Tiene una alta reproducibilidad y precisión.
  • Es segura para el paciente.
  • Discrimina entre alteraciones de la macrocirculación y microcirculación coronaria.
  • Es sencilla de interpretar.

 

Indicaciones:

La guía de presión se utiliza para valorar la severidad de una estenosis y guiar así su tratamiento. También se puede utilizar para valorar los resultados del tratamiento escogido. Algunos de los casos donde tiene mayor utilidad son los siguientes:

  • Estenosis intermedia
  • Estenosis del tronco
  • Enfermedad multivaso
  • Tras un infarto de miocardio en las lesiones no culpables
  • Enfermedad difusa
  • Estenosis secuencial
  • Bifurcaciones
  • Ramificaciones laterales 

*Más adelante dedicaremos un artículo a hablar de las indicicaciones de la FFR

 

Conclusiones:

  • La medición de la reserva de flujo fraccional (FFR) es una técnica de valoración fisiológica de una estenosis en una arteria coronaria.
  • Para realizar una FFR se necesita utilizar una guía de presión en un cateterismo cardiaco.
  •  Se obtendrá un valor numérico comprendido en un intervalo entre 0.00 y 1.00.
    • Si el valor obtenido está por encima de 0.80, la lesión evaluada no se considera significativa y el tratamiento de elección más conveniente será el tratamiento médico.
    • Si el valor obtenido está por debajo de 0.80, la lesión evaluada sí se considera significativa y el tratamiento de elección más conveniente será la implantación de un stent en la estenosis coronaria para abrir el vaso.
  • Es una técnica rápida, segura y fiable